jueves, 27 de noviembre de 2008

A dos metros bajo tierra


Quizás halláis oído hablar de esta serie en algún otro sitio o incluso la siguierais en su día, cuando la echaba la 2 o la FOX. Yo llevaba tiempo queriendo verla debido sobre todo a las excelentes críticas recogidas en múltiples medios durante muchísimo tiempo, hasta que al final me he sacudido la vaguería intelectual de encima y me he puesto a ello. La mula definitivamente es maravillosa para estas cosas, por cierto.

El argumento de la serie más o menos se podría resumir en las vivencias cotidianas de una familia que tiene un negocio de pompas fúnebres a partir del momento en que el padre y dueño de la empresa muere en un accidente de coche en el capítulo piloto. Dicho esto aclarar lo primero que no es un dramón griego de esos, como pudiese deducirse del planteamiento inicial, a pesar de que tiene toques netamente dramáticos. Tampoco es, evidentemente, una comedieta americana tipo Cosas de Casa, aunque tiene toques humorísticos, todos un tanto sardónicos, todo sea dicho.

Una vez teniendo en cuenta todo lo anterior ahora vendría definir en que género se enclava esta serie, lo cual resulta realmente difícil. Y esto es porque además de los toques dramáticos y de humor de los que hablo un poco más arriba tiene toques oníricos que bordean en las alucinaciones más delirantes, e incluso ciertos toques de atención social, aunque bastante bien encubiertos tras una capa mundana en la vivencia personal de los personajes. Joder, que pedante me ha quedado esto, por cierto.

Los personajes la verdad es que enganchan. La viuda madre de familia que resulta ser una caja de sorpresas según avanza la serie, la típica hermana adolescente que se siente el bicho raro del instituto ( y razones no le faltan para ello), el hermano menor ultraresponsable pero que no se atreve a decir a su familia que es gay, y el hermano mayor, huido de joven de la casa familiar, y que regresa ahora en parte obligado y en parte por iniciativa propia que sirve en un principio como hilo conductor del espectador, por lo menos en el capítulo piloto, y que más tarde irá adquiriendo personalidad propia, siendo para mí el más interesante de la serie.

¿Que que tal está la serie en sí? Pues hombre, bien y mal. Bien porque al ser una serie de la HBO el sello de calidad está más allá de toda duda. A nivel de producción es perfecta. La historia en si pues... depende. Si te molan las series un tanto pedantes (que conste que a mí si) la serie te gustará. Es entretenida, está muy bien llevada, los personajes son interesantes y si realizas un ejercicio de suspensión de la realidad acorde con el ambiente general de los capítulos te atraerá lo suficiente como para hacerte seguidor. Si la respuesta a lo anterior es no, evidentemente no te entrará ni a la de tres. De hecho es posible que te parezca absurda, farragosa y lo que es peor, aburrida. Para gustos los colores, que diría mi abuelo. A pesar de todo yo le daría una oportunidad, aunque sea mínima.

He dicho.

1 comentario:

vcucho dijo...

Jajajaja,te has quitado la vaguería intelectual,que bueno colega.
Pues para no salir de lo normal diré lo de siempre, que no la he visto,y tan siquiera he oído hablar de ella,pero no sé que no me llama chico,pero vamos agradezco tu recomendación.